Bangkok establece nuevos límites de emisiones: ¿los conductores corren el riesgo de recibir multas elevadas?
A partir de noviembre de 2025, Bangkok implementará nuevas normas de emisiones para los vehículos diésel, promoverá los coches eléctricos y planificará la movilidad sostenible.

Bangkok establece nuevos límites de emisiones: ¿los conductores corren el riesgo de recibir multas elevadas?
El 1 de noviembre de 2025 entró en vigor en Bangkok un nuevo hito en la lucha contra la contaminación atmosférica. Las autoridades han introducido límites de emisiones más estrictos para los vehículos diésel. Ahora, sobre todo los motores diésel más antiguos que no cumplen la norma Euro 5, deben reducir significativamente sus emisiones. La opacidad permitida de los gases de escape se ha reducido del 30% al 20%. Quienes no cumplan con estas normas pueden enfrentar multas de hasta 4.000 THB (alrededor de 123 dólares). Los vehículos que no cumplen las normas tras una inspección posterior no se pueden utilizar durante 30 días, lo que supone una gran presión financiera para muchos conductores.
Pero mientras el clásico motor diésel está bajo presión, el mercado de vehículos eléctricos (EV) está en auge en Tailandia. Según informa reccessary.com, Tailandia fue el mayor mercado de vehículos eléctricos del sudeste asiático en 2025. Se registraron alrededor de 66.000 vehículos eléctricos en los primeros siete meses del año, casi tantos como durante todo el año anterior, con 67.000 unidades. Los ambiciosos objetivos del gobierno incluyen lograr que al menos el 30% de la producción de vehículos sea libre de emisiones para 2030, lo que equivaldría a más de 700.000 unidades al año.
REDUCCIÓN DE EMISIONES E INCENTIVOS PARA VEHÍCULOS ELÉCTRICOS
Para fomentar el uso de vehículos eléctricos, se introducirán exenciones fiscales y subvenciones a la compra, así como incentivos integrales para los fabricantes de automóviles. Estos van desde exenciones fiscales de hasta el 40% para vehículos totalmente eléctricos hasta bonificaciones en efectivo para los consumidores que pueden recibir entre 2.000 y 4.500 dólares al comprar un vehículo eléctrico, según el modelo y la capacidad de la batería.
También se están impulsando los requisitos de infraestructura: se instalarán un total de 12.000 estaciones públicas de carga de vehículos eléctricos de aquí a 2030, y 2.000 estaciones ya estarán en funcionamiento a finales de 2025. Estas medidas no solo proporcionan una mejora de la calidad del aire mediante la reducción de emisiones, sino que también se espera que creen 40.000 nuevos puestos de trabajo en la producción y los servicios de vehículos eléctricos.
DESAFÍOS PARA EL FUTURO
A pesar de este avance positivo, también hay desafíos que deben superarse. La infraestructura de carga en las zonas rurales sigue siendo irregular. Tailandia también depende de tecnologías de baterías importadas, lo que puede ejercer presión sobre la industria nacional. Además, actualmente faltan trabajadores cualificados para la producción de vehículos eléctricos de última generación.
La prisa con la que Tailandia está avanzando en su política de vehículos eléctricos también tiene implicaciones regionales. Muchos países de la ASEAN, como Indonesia y Malasia, se sienten inspirados por el progreso de Tailandia y planean acelerar sus propias estrategias de vehículos eléctricos. Según dxbnewsnetwork.com, se espera que Tailandia siga siendo el principal centro de movilidad eléctrica en el sudeste asiático en los próximos años.
Otro objetivo importante es la creación de una marca nacional de vehículos eléctricos, desarrollada en asociación con el fabricante de automóviles chino Chery Automobile. Esta iniciativa tiene como objetivo crear una sólida infraestructura local de producción de vehículos eléctricos y establecer a Tailandia como un centro regional para la producción de vehículos eléctricos.
En otro paso para mejorar la calidad del aire, también se espera que Tailandia apruebe pronto su primera ley sobre cambio climático. Esto no sólo creará un marco legal para reducir los gases de efecto invernadero, sino que también promoverá un fondo climático nacional y mecanismos de mercado como el comercio de emisiones. El objetivo restante es claro: Tailandia quiere alcanzar la neutralidad de carbono para 2050, con la mirada puesta en las emisiones netas cero para 2065, como subraya thailandtip.info.